En un escenario dominado por la corrupción, y donde los prejuicios y
desigualdades conforman la realidad social del país, la verdad acaba
convertida en verdades diversas que se confunden la una con la otra en
un alucinante juego de espejos. A través de una atmósfera que deslumbra
y atrapa, este libro refleja fielmente el clima de una época y denuncia
los excesos del poder.
«Escribí ¿Quién mató a Palomino Molero? por la indignación que me
produjo el asesinato de un joven avionero de la base aérea militar de
Talara que quedó misteriosamente silenciado por la burocracia oficial.»